Hay días en mi vida en que pienso y siento que cometo error tras error.

Algunas veces porque no me detuve a reflexionar en lo que hacía y otras porque lo hice, pero no medí bien los riesgos.

Como sea, esta sensación es generada más por mi mente que por los hechos mismos.

Hace unos años, cuando me certifiqué para impartir los cursos Sana tu vida, de Louise L. Hay, escuché una frase que me hizo mucho sentido.

“Lo estás haciendo lo mejor que puedes”. 

En una primera lectura uno podría pensar que esta frase es una especie de autojustificación, pero tiene mucho más fondo del que aparenta.

Y lo que nos dice es una gran verdad: lo que he hecho, y lo que tú has hecho hasta hoy, es lo mejor que pudiste hacer.

Primero, porque tus conocimientos, tu experiencia de vida te hizo actuar de la manera en que lo hiciste ante una situación determinada.

En segundo lugar, porque tu nivel de consciencia era el exacto para hacer así las cosas.

No, no es autojustificación, es una realidad, porque te puedo asegurar que con la experiencia y la consciencia que hoy tienes te llevarían a actuar de una manera diferente.

Así es la vida, un continuo aprendizaje, una continua expansión de tu consciencia, pero para eso debes tener apertura, porque si no repetirás el mismo error una y otra y otra vez.

Así que recuerda: tú y el resto del mundo lo están haciendo lo mejor que pueden.